La historia de Grimod de La Reynière, el primer crítico gastronómico
Alexandre Balthazar Grimod de La Reynière vivió en Francia en la época de la Revolución.
Fue el hijo único de un matrimonio rico que lo marginó porque sus manos eran deformes. Pero fueron precisamente esas manos las que lo convirtieron en el personaje y la personalidad que fue.
Comenzó como crítico teatral, pero su rebeldía, su inconformismo y la mirada feroz sobre las costumbres de su época lo llevaron al exilio, de donde volvió convertido a la fe de la gastronomía. Observó, criticó y educó a la sociedad de su tiempo a través del comer.
Sus comidas fueron famosas, pero sus escritos lo sobrevivieron hasta nuestros días. A diferencia de Savarin o de Carême (o del mismo Dumas), Grimod hizo de la crítica gastronómica un género y una manera de pensar la relación de las personas con su época.
Grimod fue el primer crítico gastronómico.
Esta es su historia.
